Revisa tu ropa periódicamente y guárdala después de usarla. Si notas que le hace falta algún botón, coloca uno nuevo o bien lleva tu prenda a la sastrería.
Trata de llevar tu ropa a la tintorería y tus zapatos con un lustrador experto para mantener tu guardarropa impecable, esos pequeños detalles hacen la diferencia en tu presentación.
Adquiere accesorios que te funcionen y sean de alta calidad, lleva contigo un buen bolígrafo, un maletín o bien una buena bolsa son detalles que le darán más personalidad a tu presentación.
No uses prendas ajustadas, cortas, flojas o que sean demasiado reveladoras, cuando creas que alguna prenda no es apropiada, no lo uses o cuando alguna prenda ya se ajuste bien a ti es mejor donarla.
Una buena presentación también está en el cuidado de tus manos, por ello es importante que cuides que tus uñas estén limpias y cortadas ya que la mayoría de las personas observan tus manos todo el tiempo. Este tipo de cuidado transmite que prestas especial atención al detalle.